martes, 27 de abril de 2010

No te quiero sino porque te quiero

Anoche estuve buscando las repuestas a las preguntas más profundas de la vida y no se me ocurrió mejor cosa que hacerlo entre los poemarios viejos de la biblioteca de mi madre hoy ya muerta.

Me quedo con este soneto de Pablo Neruda y de pronto, pensando que hace demasiado tiempo que no escribo aquí, decidí compartirlo con quien quiera leerme:

Soneto LXVI

No te quiero sino porque te quiero
y de quererte a no quererte llego
y de esperarte cuando no te espero
pasa mi corazón del frío al fuego.

Te quiero sólo porque a ti te quiero,
te odio sin fin, y odiándote te ruego,
y la medida de mi amor viajero
es no verte y amarte como un ciego.

Tal vez consumirá la luz de Enero,
su rayo cruel, mi corazón entero,
robándome la llave del sosiego.

En esta historia sólo yo me muero
y moriré de amor porque te quiero,
porque te quiero, amor, a sangre y fuego.

Pablo Neruda